Mi pasión por las motos empezó no hace mucho, uno de los detonantes fué porque mi padre es un amante de las Harley Davidson y tiene una des de hace unos cuantos años; aun que eso ayudó a desencadenar la pasión, no fue el principal motivo para sacarme el carnet de moto A2. Os voy a explicar cual fue…

Actualmente vivimos en una sociedad un poco estereotipada, todavía, y por desgracia! Y yo… Yo soy un persona de romper esquemas y acabar con esos estereotipos, como buena maestra de educación infantil (Soy graduada de EI en la universidad); así que un día oí un comentario un tanto machista, esteriotipado o quizás el hombre que lo dijo, no lo pensó muy bien y fue el siguiente:

Las motos no son para las mujeres, es una cosa de hombres fuertes

Bueno… quizás exagero un poco el comentario preciso y entonces, el día que ocurrió, no supe reaccionar porqué no quise debatir sobre ello pero pensé que debía de sacarme el carnet de moto, sin más, para entonces poder generar debate; moto y chica era posible y tangible, cualquier persona es capaz de llevar una moto, ya sea grande o pequeña.

Así de rápido fue la decisión, una decisión que cambiaría mi vida.

Un día me apunté a la autoescuela y en unos 6 meses ya tenía el carnet entre mis manos, todo a la primera! Inicialmente, cuando conducía la moto de la autoescuela y realizaba las prácticas, llegué a pensar, incluso, que no estaba echa para ello y no sabia bien bien el motivo por el cual me subía a la moto y circulaba por la ciudad, incluso cuando me compré la moto, hasta un cierto tiempo le tuve mucho respeto, sabéis a lo que me refiero? Mis amigos me decían que era respeto, aun que yo lo nombraba miedo porque no lo sabía distinguir. Ahora mi experiencia me permite conocer a que se referían en aquel día.

Pero queréis saber una cosa?

No me arrepiento en absoluto, porque todo lo bueno estaba por venir… Descubrir la pasión de viajar en moto ! La libertad, la adrenalina, los retos, el compañerismo, el amor, la pasión […] 

Dejando la moto de banda, hablemos un poco sobre mi.
Mi edad es algo joven, muy muy joven, o al menos eso dicen, supongo que depende para quien, no? Aun que los años avanzan y no perdonan a nadie, vamos al grano!
Soy de la generación de los 90, como la Game Boy color, los tazos y los SMS acortados, lo recordáis?  Cuando empezó todo aquello del móvil, los videojuegos portátiles, las olimpiadas en Barcelona, la canción de la Macarena, la película de Toy Story, que hora creo que ya van por la tercera… y la década de Marquez!

Si, yo también llevo tatuado un 93 en mi fecha de nacimiento.

Y aun que todos los que habéis entrado en esta página web haya sido por el tema motor, tengo otros hobbys algo ocultos, y digo esto porque la moto ha absorbido parte de mi tiempo libre, por no decir todo. Toco el piano y adoro el baile latino, la bachata!

Después de obtener el carnet, en el año 2015, llegó entonces el día de decidir que moto comprarme. Empecé por mirar motos de segunda mano, concretamente una modelo BMW, la 800 GT, pero aun que fueran motos que me gustaban, no me sentía cómoda con ellas, no recibía buenas sensaciones. No os ha pasado alguna vez que nunca os había gustado algo y de repente, se te cruza en tu vida y es hora de tomar decisiones… A pesar de jamás haber fijado en una…

Pues si, tocaba decidir cual era la moto que me acompañaría en mis rutinas y la que se convertiría en algo más que un simple vehículo.

No solo fui a mirar motos de segunda mano, opté por ir a concesionarios a inspirarme y ver lo que mejor se adaptaba a mi, y a mi bolsillo, por supuesto. Así que, decidí mirar más marcas y modelos, acudí a Yamaha y me enamoró la Super Tenere, pero no estaba dentro de mi presupuesto y era demasiado pesada para mi; acudí a Honda a ver la nueva Africa Twin, pero no me acababa de convencer, entonces, la estética de la moto, y finalmente decidí ir a un concesionario BMW y no me dio tiempo ni a pensármelo; Emilio, el comercial de Motor Munich de Sabadell, me vendió la moto, nunca mejor dicho! Creo que era una moto ideal por altura, estética, colores… Si, me enamoraron los colores…

Firmé el contrato y una semana después entró en mi vida una BMW F700GS, la que seria mi primera moto.

Porqué escogí este modelo? Pues me llamó mucho la atención el hecho de ser menos vendida que la 800GS y ser muy parecida, además del precio, era inferior al modelo 800 y llegaba mejor al suelo, que eso era muy importante para mi, poder dominar la que seria mi compañera de viaje y de vida, prácticamente.

Creo que hice muy buena elección, no opináis lo mismo? 

Su nombre era la Rojita debido a su color rojo racing que conquista miradas, aun que realmente yo le llamaba princesa; todo viene porque cuando solía besar el suelo, lo hacía como la realeza: suave y con glamour, sin sufrir prácticamente ningún daño. 

Actualmente esta moto ya no se encuentra en mi vida, en verano de 2018 decidí venderla para conseguir algo con un poco más de potencia.

BMW comentó que iba a sacar a la venta las nuevas F850GS y la F750GS. El día que llegaron, Ivan Martí, de Barcelona Premium de Sant Boi de Llobregat, comercial de alli y muy buen amigo mio, me avisó cuando las pusieron para probar. Y así fue, me enamoré de ella a primera vista, y cuando la probé supe que era lo que buscaba, a pesar de haber probado la nueva Africa Twin de Honda. La BMW era el concepto que buscaba, una trailera más carretera que la AT. 

En 2015, cuando compré la rojita, realicé el primer mini viaje, a Andorra y con paquete! Entonces me parecía algo increíble, iba a estar más de dos horas en la moto e iba a hacer más de 150km seguidos; este iba a ser el comienzo de muchos viajes. Además, hay un dicho de mi familia que dice que cuando te compras un vehículo nuevo, tienes que estrenarlo con un gran viaje, y como no iba a se a lo grande ir de escapada a Andorra? Entonces lo era, créanme, ahora queda como una anécdota que contar y muchos accesorios, equipación y cachivaches que compré aquel día para la moto y para mi. 

En 2016 el gran viaje fueron los alpes, el primer gran viaje fuera de España de larga durada. Fue una ruta por los Alpes iniciada en Suiza, trazando el gran Stelvio, el famoso Saint Gottardo, la Furka, entre otra infinidad de pasos, un viaje que hay que hacer una vez en la vida.  Ver nieve en verano, o sufrir -2 grados con ropa de verano, no tiene precio; os lo aseguro!
Además acudimos a Formigal, a los BMW days y otras muchas rutas que realicé acompañada de los Moteros de Manresa y alrededores, y con mis nuevas amigas y amigos moteros. 

En 2017 hice mi primer viaje sola, el viaje definitivo que me hizo pensar que viajar sola es la mejor manera de viaja acompañada. Realicé la transpirinaica de punta a punta, de Cadaqués a Irún, del mediterraneo al atlántico, de este a oeste… Un gran viaje (que podéis visualizar aquí) que me hizo conocer el lado más salvaje de ir en moto, haciendo acampada cada una de las noños, bajo climatologias inesperadas pero lleno de buenos recuerdos y amistades realizadas en el camino. Otro de los grandes viajes fue Galicia off road, incluyendo Soria, Picos de Europa, Burgos, etc. y no nos olvidemos de las Bardenas Reales, un sitio místico que recuerda a Marruecos.
Durante este año he ido realizando pequeños viajes a diferentes destinos Españoles como Teruel, Madrid, Valéncia, Pirineos, etc.

En 2018 me aventuré a visitar un país de un continente diferente: Marruecos. Esta aventura iba a ser la central del año 2018, con mi 700 y entonces, ya tenía una idea de que iba a ser la última de las aventuras con esta moto. Marruecos es un país magnífico, en el podéis leer aquí las aventuras que viví durante esos intensos 10 días de offroad, de descubrimientos, de conexión con una cultura distinta, de comer cosas nuevas o de descrubrir también, alguna carretera, un viaje que recomiendo a cuaqluiera que quiera vivir una experiencia increiblemente mágica. Posteriormente cambié mi moto y eso hizo que el viaje veraniego fuera a un país europeo: Italia. Recorrí este país bordeando por completo la silueta de la bota. Un país que me sorprendió, tanto la cultura, tan parecida a la nuestra, como las magníficas carreteras, puertos de montaña, playas, puestas de sol, modo de conducción, comida (la pizza y la pasta entre ellos), que os voy a contar… Creo que un país se conoce estando tiempo en el, descubriéndolo! Durante este año también he realizado pequeñas salidas por España y Francia, las que descubrí nuevos caminos y nuevos amigos!